Miles y miles de hectáreas están inundadas y los productores quedaron al borde del abismo. Perdieron la producción, no pueden trabajar más y cada día que pasa se endeudan más. Viajamos hasta el lugar para mostrarte todo.
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450 mil hectáreas sepultadas. Campos, colegios y casas aislados. Productores que perdieron todo. Así de dramática es la realidad que cada día enfrentan en el sudeste cordobés.
Un equipo de El Doce viajó hasta el corazón de la zona afectada para mostrar lo que pasa. «No podemos sacar el cereal, la población está aislada, sin asistencia médica. Es sumamente grave», graficó Guillermo, uno de los tantos productores afectados.
Si bien reconoció que el Gobierno provincial «está trabajando», dejó en claro que la ampliación de la emergencia agropecuaria no alcanza. «El pago de impuestos es una partecita. Tenemos insumos sacados al fiado y no tenemos para pagarlos. Estamos con el agua al pecho, no tenemos más tiempo, lo tienen que entender», le dijo a Fabiana Dal Prá.
El drama en general se profundiza al conocer la historia de cada familia. La gente que vive en la zona hace años evalúa como última alternativa irse. «Hace siete años que estoy y es la primera vez que veo tanta agua así. Varios vecinos ya se han ido. Pedimos una solución, nada más», rogó Emanuel.